jueves, 30 de abril de 2009

Deserción

Ponerle tiempo al hecho,
acotarlo con las alambradas
que laceran los restos
que quedaron de la piel,
sopesarte en el acto contiguo,
medirlo, valorar la posibilidad
de que sea cierto lo que crees,
y pensar en el inquieto miedo
que acompaña al placer,
y derrocar a ese miedo interior,
y prometerle a la culpa
que no volverá a suceder jamás,
y morir por volver a suceder.


No te creíste invencible
al comenzar este letargo,
y sin embargo, te aferras
a las circunstancias
como el olivo se ata
a la tierra que nació seca,
y quieres convencerte
de todo lo contrario,
aunque ahora
el otoño parezca
una estación sin tren,
o un destino sin llegada,
y en la madrugada
esperas a esa mala jugada
que comienza con el primer sol.

"Deserción"
© El País de los Tejados. chus alonso díaz-toledo.

viernes, 24 de abril de 2009

Jornada

Tú y yo, sin necesidad
de adornos brillantes,
ni de horarios escuetos,
simplemente tú y yo,
sin anillos amarillos
para casi nunca,
sin firmas que serán
grises siempre,
solos tú y yo,
sin sanciones de sellos tristes
a la sombra de un tribunal.

Nosotros, seres de otro tiempo,
en medio de este mundo
que no llega a rozarnos,
y también nosotros,
con todo el tiempo del mundo
rozándonos la piel,

Tú y yo, a la vez,
repetidos en lo irrepetible,
tú y yo, al ritmo
del fuego sin calma,
peleándole al frío,
sin paz en nuestras fronteras,
siempre tú y yo,
sin más motivo que el universo,
historias de agua, gotas de viento,
alegrías que se envuelven
con paños de seda, y de pena,
tú y yo, así, sin remedio,
tú y yo, como dos relojes de arena.


"Jornada"
© El País de los Tejados. chus alonso díaz-toledo.

martes, 14 de abril de 2009

Humedad reseca

Si al menos se me secaran
completamente las palabras,
si pudiese dejar de escribirlas,
dejar de pensarlas,
dejar de intentarlas,
dejar de entenderlas,
y olvidar de dejarlas a las a la luz.

Si fuesen como el cuero viejo
que tiene grietas de tiempo,
o como el barbecho, de agosto,
se volarían con los primeros
vientos que llegasen con septiembre.

Pero las palabras me mojan
la boca sin quitarme la sed,
son espejismos húmedos
que se quiebran al paso del tacto,
y realidades resecas,
que me alimentan con la sal
de las heridas abiertas,
y no puedo callarlas,
ni puedo decírtelas,
simplemente no queda sitio
para que pueda salir el sol.


"Humedad reseca"
© El País de los Tejados. chus alonso díaz-toledo.

http://pokitochus.blogia.com/

martes, 7 de abril de 2009

Desintegración

Presencio el caos que los átomos
representan desintegrándose en la pared,
siento cómo el viento del exterior llega
hasta el pulmón de los pensamientos,
puedo notar ese olor que vive la calle,
cuando la calle tiene huellas de noche,
y saboreo el escozor de las pequeñas
palabras que siempre quise volver a decir.

Me pregunto el porqué de todo este proceso,
intento que la razón tan sólo sea un color
al que no le asuste olvidarse de los límites,
qué no tenga pudor en ser calor más allá
de las líneas de un dibujo ya impuesto,
pero vuelven a crecer miles de órdenes
de-li-mi-ta-das por espacios blindados,
y recuerdo que en el principio del cosmos
fuimos una falsa implosión hacia la nada.

La paradoja exacta del tiempo no tiene
lugar en las costumbres de la habitación,
creo que sin ella sería posible morir,
en este preciso momento,
para renacer en la siesta de tus labios,
como lo hace el vino en la uva nueva,
y embriagarme una vez más de ti,
y padecer la resaca opaca
que queda tras la ausencia de tu nombre.


"Desintegración"
© El País de los Tejados. chus alonso díaz-toledo.